Esta semana las brechas entre los dólares financieros y el oficial se cerraron tanto «desde arriba» como «desde abajo», debido a que el «contado con liqui» (CCL) y el «bolsa» (MEP) registraron su segunda caída semanal consecutiva, a la vez que el Banco Central (BCRA) aceleró ritmo de devaluación de la cotización en el segmento mayorista.
El dólar (CCL) -operado con el bono GD30- terminó la jornada en los $216,21, por lo cual acumuló un retroceso de 2% (-$4,03) en la semana y un derrumbe de 6,5% (-$14,94) desde que el Gobierno anunció el entendimiento con el Fondo Monetario Internacional (FMI).